Afrontar la vuelta al trabajo después de las vacaciones de verano y volver a la rutina puede suponer un cambio brusco para muchos. En cualquier puesto de trabajo es habitual tener cierto estés por los cambios y exigencias, por lo que cuando regresamos de vacaciones de verano es muy posible que sea mucho más costoso comenzar a adaptarnos al ritmo que llevábamos antes.
Llevar una vuelta al trabajo lo más relajada posible es fundamental para no sufrir de agotamiento o estrés, lo que disminuirá nuestra salud física y mental, además de la productividad en el puesto de trabajo.
Algunos síntomas de la vuelta al trabajo y el estrés postvacacional
El malestar puede variar dependiendo de la situación de cada individuo y muchas veces pueden alargarse hasta tres meses después del regreso. Algunos de los síntomas más habituales son:
- Ansiedad general.
- Malestar físico y mental.
- Falta de concentración.
- Cambios de humor.
- Palpitaciones y sudoraciones.
- Dificultades para conciliar el sueño.
En resumen, los efectos negativos producidos son muy similares a los de un episodio común de ansiedad. Antes de comenzar a tomar medidas para nuestra vuelta al trabajo, debemos tener una disposición lo más positiva posible, por lo que también puede ser interesante reflexionar acerca de lo que no nos gusta de nuestro puesto de trabajo.
Consejos para combatir el estrés de la vuelta al trabajo
Estos tips te ayudarán a afrontar la vuelta de vacaciones en el caso de que te afecte de manera negativa:
- Organiza tus tareas: una buena distribución del tiempo hará que no nos saturemos por el volumen de trabajo. Aprende a delegar para no sobrecargarte, y detecta las situaciones desencadenantes del estrés que puedas experimentar, para así poder abordarlas. También es importante que hagas los descansos adecuados, especialmente en estos momentos.
- Mejora tu estilo de vida: con la vuelta al trabajo también aparece la vuelta al gimnasio. Volver a la rutina de ejercicios puede ser una manera de liberar tensiones y mejorar la productividad. Acompaña esto de una dieta saludable, disfrutando de preparar alimentos sanos que nos gusten.
- Un descanso reparador es fundamental: como hemos mencionado antes, el insomnio y los trastornos del sueño son algunos de los síntomas más comunes por el estrés de la vuelta al trabajo. Por este motivo debemos intentar descansar por las noches lo mejor posible; dejar de lado la televisión y el resto de dispositivos antes de ir a dormir o meditar pueden ayudarnos a conciliar el sueño.