Con las navidades tan cerca, quiero compartir con vosotros trucos para sentiros saciados y evitar posibles complicaciones.
Aunque nuestra alimentación sea correcta a nivel de productos (imaginemos que ingerimos comida orgánica, grasas buenas, todo natural y saludable), si comemos demasiado cada vez que nos sentamos a la mesa, podemos perjudicar nuestra salud de una forma muy nociva. De hecho, comer demasiado puede provocarnos desde dolores de espalda hasta infartos al corazón.
Si comemos mucho en un día, podemos consumir hasta 5000 calorías.
Esas calorías acumuladas se pueden traducir en tres o cuatro kilos adicionales en solo un mes, lo que será una sobrecarga enorme para las lumbares, y podemos acabar teniendo una lumbalgia, por ejemplo.
Asimismo, muchos estudios demuestran que las comidas y cenas copiosas puede cuadruplicar la posibilidad de tener un infarto tan solo dos horas después de haber comido. La incidencia de infartos siempre se incrementa en los meses de diciembre y enero, por las grandes comilonas que nos metemos entre pecho y espalda durante las navidades.
Hay que tener en cuenta que cuando consumimos esas cantidades ingentes de comida, podemos perfectamente introducir en nuestro organismo unos 300 gramos de grasa, aunque sea buena. También muchos hidratos de carbono y sales. Entonces, nuestro cuerpo tiene que trabajar más duro para digerir y eliminar estos banquetes.
Aquí os dejo diez soluciones para las personas que no pueden saciarse:
1. Bebe medio litro de agua media hora antes de cenar o comer.
2. Puedes empezar con una ensalada, o mejor aún, con una sopa. Te llenará.
3. Come en un plato más pequeño.
4. Comiendo más despacio te puedes saciar más.
5. Elige entre entrante o postre. Yo eliminaría el postre.
6. Cuidado con el vino y la cerveza. Bebe medio vaso de agua entre bebidas alcohólicas.
7. Habla durante la comida, comerás menos.
8. Comer una manzana media hora antes de la comida puede reducir bastante tu apetito.
9. Procura andar media hora después de la cena.
10. Si eres una persona que no se puede controlar, procura comer o cenar a solas de vez en cuando. Sin compañía, las cosas no saben tan buenas.
Espero que aplicando estos diez sencillos trucos a tu rutina, puedas disfrutar más y mejor de la comida.
Si quieres más información acerca de lo que tu cuerpo te pide, te recomiendo que leas Tú eres tu medicina, un libro sobre ti y como aprender a cuidarte desde el interior.
