En este artículo explicaremos la relación entre el dolor crónico y la depresión; y la solución que la quiropráctica ofrece.
Quienes padecen dolores crónicos, saben perfectamente que esto significa, levantarse, vivir y acostarse con dolor, sin que desaparezca ni un minuto. Es por ello que el dolor crónico es el causante de diferentes desórdenes: estrés, depresión, ansiedad, insomnio, dificultades de concentración, pérdida de memoria,…además estos síntomas pueden ir cada vez a más, puesto que al ser un dolor constante, el paciente no pude desconectar y su mente retroalimenta el dolor. El dolor crónico también conlleva efectos psicológicos cómo la baja autoestima, miedos, incertidumbre al futuro.
Dolor crónico, ansiedad y depresión, el círculo vicioso de nuestro siglo
¿Qué puede hacer la quiropráctica por mi?
- Los ajustes quiroprácticos ofrecen una solución natural para la depresión, sin tener que depender de pastillas y evitando las consecuencias negativas que a largo plazo traen consigo los tratamientos químicos.
- Los ajustes, especialmente de las cervicales superiores (upper cervical complex) restauran el riego nervioso, que equilibra producción de ciertos neurotransmitores, que en desequilibrio pueden causar depresión.
- El ajuste ayuda a mejorar desequilibrios en el sistema endocrino, de forma que el organismo vuelve a funcionar correctamente.
Para concluir, me gustaría ofrecer unos consejos para aquellos que estén buscando solución a la ansiedad, depresión o dolores crónicos.
En primer lugar, visita a un quiropráctico, cambia tu dieta (más adelante hablaremos de esto en detalle), deja de fumar, disminuye el consumo de alcohol, pasa mas tiempo al aire libre, mueve el cuerpo, medita, sal a correr…pero sobre todo, ¡no olvides rodearte de amigos y familiares!
El dolor crónico, la ansiedad, o la depresión, no son problema con la quiropráctica.