Ante esta pregunta, es inevitable que me remonte a mis días de estudiante en la universidad. Si me lo permitís, hoy me gustaría compartir con vosotros mis reflexiones y opinión personal, sobre lo que ha significado para mi, estudiar quiropráctica.
Lo primero que me viene a la cabeza, son los recuerdos de mi época universitaria; las clases, los compañeros y nuestras motivaciones para estar allí, en aquel preciso espacio tiempo, estudiando juntos para convertirnos en quiroprácticos.
A diferencia de muchos de mis compañeros, yo iba para médico. En cambio, la mayoría de mis amigos eligieron estudiar quiropráctica después de haber tenido problemas de salud. El patrón se repetía, cuando la medicina tradicional les había fallado, la quiropráctica apareció solucionando sus problemas, y de alguna forma su manera de agradecerlo era esta.
Como os decía, mi camino iba en otra dirección. Yo iba a estudiar medicina, pero en mi familia ya se conocía la quiropráctica y acabaron convenciéndome para que cambiara de rumbo. Lo cierto es que se lo agradeceré siempre, aunque confieso que no fue hasta el tercer año de carrera, cuando empecé a entender la grandeza de la profesión. En aquel momento surgió mi amor por esta disciplina y por mi trabajo, y aunque hayan pasado 11 desde entonces, esta pasión se alimenta cada día.
Volviendo a la pregunta de por qué estudiar quiropráctica; te diré qué es lo mejor que puedes hacer si te gusta ayudar a otras personas y entiendes la importancia y complejidad del cuerpo humano y su anatomía. Como ya sabes, los quiroprácticos estamos especializados en la columna vertebral y el sistema nervioso, y por lo tanto ayudamos a todas aquellas personas que sufren dolores como: dolor de espalda, lumbalgia, escoliosis, hernias, ciática….
Pero la labor de un quiropráctico no concluye aquí. Por medio de la quiropráctica también podemos ayudar a enfermos que carecen de acceso a medicamentos y la cirugía, tratando otras muchas patologías relacionadas con el sistema nervioso y que, en ocasiones, la medicina tradicional no es capaz de solucionar.
¿Qué necesitas para ser quiropráctico?
Pues básicamente, mucha ilusión y la ayuda de tus propias manos. Además, ahora ya no es necesario salir fuera de España para estudiar la carrera, puedes licenciarte como Doctor en Quiropráctica en el Barcelona College of Chiropractic. Si quieres ampliar información sobre las asignaturas que conforman la carrera, aquí te dejo el programa de estudios.
“Teniendo en cuenta la presión que sufre el sistema de atención médica tradicional y el liderazgo de la quiropractica en la revolución de la salud y el bienestar natural, Este es el mejor momento para emprender el viaje hacia el futuro” (Adrian Wenban, Director del Barcelona College of Chiropractic).
A mi, personalmente la quiropráctica me ha inspirado a ayudar a todos que me rodean, a vivir una vida más plena a través de un estilo de vida saludable, y os aseguro que esto es lo que me da la felicidad día tras día. ¡Estudiar quiropráctica ha sido lo mejor que he hecho en mi vida!