Llegada a cierta edad nos oímos algo muy común…, me ha dicho el especialista que tengo artrosis.
¿Qué es la artrosis?
La osteoartritis o artrosis es una enfermedad degenerativa articular caracterizada por la destrucción del cartílago hialino que recubre las superficies óseas.
En la actualidad es una de las enfermedades articulares mas frecuentes y que va en aumento debido a que va asociada con la edad. Hoy en día un 10% de la población española padece artrosis.
A partir de los 40, 50 años es común la artrosis según en que personas y dependiendo de ciertos factores.
Aunque no sea muy conocida la causa de ésta enfermedad si que podemos hablar de una serie de factores que influyen en su desarrollo:
- Sexo: Por debajo de los 55 años, la afectación articular es similar en hombres y mujeres, pero por encima de esta edad la articulación dañada mas frecuente es la cadera en los hombres y las articulaciones de las manos y las rodillas en las mujeres.
- Edad: A partir de los 40,50 años empieza la degeneración ósea.
- Herencia: Este factor es muy importante y el que más suele marcar en este tipo de problema.
- Obesidad: A mas peso mas presión sobre el esqueleto.
- Inestabilidad articular: Laxitud, deformidades.
- Traumatismos repetidos.
¿Cuáles son sus síntomas?
Su principal síntoma es el dolor, profundo y mal localizado.
Sobre todo es un dolor que se acentúa cuando se exige un esfuerzo a la articulación enferma, bien sea de movimiento o de carga.
El dolor se acentúa conforme avanza el día. Cuando la enfermedad está muy avanzada el dolor puede incluso aparecer con el reposo o en el descanso nocturno.
Cuando la artrosis se produce en la columna vertebral el dolor se manifiesta más en el cuello y en la zona lumbar. Hay reducción de movilidad y se contracturan los músculos de la zona afectada.
También perjudica mucho en esta enfermedad las subluxaciones en la columna.
Cuando una vértebra pierde su posición natural y atrapa los nervios que salen entre ellas produce una irritación e inflamación que puede trasmitirse en forma de dolor a las extremidades, especialmente a las inferiores, con crisis de ciática.
El objetivo sería aliviar el dolor y el mantenimiento de su capacidad funcional.
Las claves serían:
- Hacer ejercicio de manera moderada a diario para mantener la movilidad de las articulaciones en perfecto estado y evitar la atrofia muscular.
- Mantener siempre un peso correcto. Todo el peso que llevemos encima de más es como ir cargados con una mochila llena de piedras.
- Alimentarse de manera equilibrada y sana, con el aporte de vitaminas correspondiente.
- Y sobre todo mantener un buen mantenimiento de nuestra columna y ajustes regulares con un buen quiropráctico.