Ansiedad, según la RAE se define como un estado de agitación, inquietud o zozobra del ánimo. ¿Quién no se ha sentido así en algún momento? es más, ¿Quién no se ha sentido así precisamente cuando las ansiadas vacaciones están a la vuelta de la esquina?. Justo es en ese momento cuando nuestro nivel de ansiedad aumenta haciendo que el tiempo pase increíblemente despacio.
¿Qué puedo hacer?
Cualquier método utilizado para reducir el estrés ayuda al cuerpo a calmarse y se vuelven menos sintomático. Cuanto menos estimulado está el cuerpo, menos sintomático será. De forma que actuando directamente sobre el estrés reducimos el nivel de ansiedad, siempre que ésta sea producto del estrés. Hay que tener en cuenta que el estrés suele tener como manifestación la ansiedad, en cuyo caso se trata de una respuesta emocional provocada por un agente desencadenante. Si actuamos sobre el estrés estaremos actuando sobre nuestra ansiedad y en el caso de ansiedad prevacacional en la mayoría de los casos es debido al estrés.
¿Cómo puedo disminuir mi nivel de ansiedad?
Antes de plantearnos disminuir nuestro nivel de ansiedad, debemos de conocer en qué nivel nos encontramos. Según la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés podemos hacernos un idea, no de forma muy precisa, de nuestro nivel de ansiedad, con una selección de ítems o cuestiones, extraídos del Inventario de Situaciones y Respuestas de Ansiedad (ISRA).
MUESTRA DE SÍNTOMAS O RESPUESTAS DE ANSIEDAD
Respuestas Cognitivas (lo que pensamos o sentimos)
– Preocupación
– Pensamientos o sentimientos negativos sobre uno mismo
– Inseguridad
– Temor a que nos noten la ansiedad y a lo que pensarán si esto sucede
Respuestas Fisiológicas (lo que sucede en nuestro cuerpo)
– Molestias en el estómago
– Sudor
– Temblor
– Tensión
– Palpitaciones, aceleración cardiaca
Respuestas Motoras (lo que manifestamos en nuestro comportamiento)
– Movimientos repetitivos (pies, manos, rascarse, etc.)
– Fumar, comer o beber en exceso
– Evitación de situaciones
Una vez que tenemos una orientación de nuestro nivel de ansiedad podemos ponernos a trabajar para disminuirlo.
¿Cómo lucho contra el estrés?
Entre otras actividades podemos practicar yoga, meditación, ejercicio,… es decir, cualquier actividad que nos relaje, nos distraiga y nos haga sentir felices.
Si además todo lo anterior lo complementamos con la quiropráctica, la cual actúa sobre la causa y no sobre el síntoma también reduciremos nuestro estrés y por lo tanto el nivel de ansiedad producido por el mismo. Es decir con los ajustes quiroprácticos logramos que la inteligencia innata realice correctamente su trabajo y nuestra salud fluya desde el cerebro, a través de la médula espinal, al resto del cuerpo. Para poder lograr esto debemos de tener nuestra columna vertebral libre de subluxaciones o interferencias y así dejar que la información fluya libremente.
Así que sería una buena idea que antes de comenzar tus vacaciones te sometieras a un chequeo de tu columna y así eliminaras las subluxaciones para comenzar un verano al cien por cien.