¿Es la soja ángel o demonio? Ata Pouramini nos explica cuándo este alimento es bueno para llevar una vida saludable y cuándo supone un peligro. ¡No te pierdas el vídeo sobre soja y salud!
¿Qué pasa con la soja? ¿Es buena o mala para nuestra salud? Lleva ya un tiempo de moda pero también se han oído voces que critican esta relación entre soja y salud. Ata Pouramini nos ayuda a arrojar luz sobre esta polémica en la que se discute si la soja es un ángel o un demonio para llevar una dieta saludable.
La soja puede ser buena para la salud
La alubia de la soja es una legumbre buenísima para la salud, tiene magnesio, calcio, hierro, vitamina E. También los brotes de soja que se ponen en las ensaladas o en la comida asiática. Pero debes saber que “estos alimentos no tienen nada que ver con los productos de soja procesada”, advierte el orientador en salud.
Los productos fermentados de soja como el natto y el miso también son buenos para la salud porque son fermentados de forma natural.
Pero también mala si hablamos de… soja procesada
El problema empezó hace ya años en Estados Unidos cuando empezaron a usar el aceite de la soja para cocinar comidas, ya que allí no está tan accesible el aceite de oliva. ¿Qué ocurre con este aceite de soja? A la hora de quitar el aceite de la alubia de soja hay un producto de desecho, la proteína aislada de soja, que empieza a mezclarse con otra serie de productos como agua, leche… para elaborar, por ejemplo, leche de soja o yogures de soja. Por otro lado, debes saber que la mayoría de la comida procesada contiene derivados de soja, no hay más que fijarse en sus etiquetas.
Y ¿qué ocurre con estas dos “versiones” de la soja? ¿Es que de esta forma la soja ya no es tan buena para la salud? “La soja procesada y la proteína aislada de soja están relacionadas con un montón de enfermedades reproductivas, cardiovasculares, inmunológicas, hormonales, incluso con el cáncer de mama“, afirma Ata Pouramini que asegura que ” la Asociación Dietética de Gran Bretaña ya ha advertido a los padres de que deben eliminar los productos de soja para los niños y disminuir el consumo para los adultos”.
Con estos datos en la mano, el orientador en salud recomienda abandonar el consumo de productos como la leche de soja y sustituirlos por otras alternativas como pueden ser, en el caso de este lácteo, por la leche de almendras, de coco o incluso leche cruda.
Vía medicinatv